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11/09/2014 |
Hace algunas semanas un panel del organismo dictaminó que las herramientas que el Gobierno ha venido usando en los últimos años para limitar las importaciones son "incompatibles" con la normativa internacional por lo que el fallo, que Cancillería anunció que será apelado, abre la posibilidad de que las economías afectadas, a modo de represalia, limiten las importaciones procedentes de la Argentina. Esta situación se convierte en un frente nuevo a resolver para Argentina en el mundo y estimula, al mismo tiempo, las miradas interesadas que sostienen que nuestro país se aleja cada día más del sistema internacional.

En el caso de la OMC son ya conocidas las trabas, que por una cuestión de coyuntura, Argentina impuso a las importaciones y era de esperar la crítica y acciones de los países afectados por esta situación en el seno del organismo que vela por el libre comercio mundial, aunque siempre en beneficio de los más grandes. Pero este es el mundo de List y no el de David Ricardo. El sistema internacional de comercio describe una tendencia marcada y sostenida hacia el proteccionismo, más que aires de libre cambio. Y los principales actores de esta tendencia son justamente los países centrales con Estados Unidos y la UE a la cabeza. Argentina en todo caso hace lo que hacen todos. Ni más ni menos. De acuerdo a su accionar, nuestro país está incluido en el mundo.

Según la Cancillería argentina, en la historia de la OMC nuestro país ha sido demandado en 17 oportunidades, de las cuales sólo dos ocurrieron desde la asunción de Kirchner como Presidente en mayo del 2003. Además, señaló que entre los 157 miembros del organismo, los dos que más veces han sido denunciados fueron los Estados Unidos, con 114 casos, y la UE, con 70.

Los países poderosos del mundo son los más proteccionistas, al tiempo que esperan reglas diferenciales con respecto a los estados del tercer mundo. Las sanciones operan entonces como una política de presión y amenaza, tanto de Estados Unidos como Europa, intentando sostener políticas comerciales preferenciales.

Algunos datos del Informe sobre las medidas comerciales y de inversión, de junio de 2012, elaborado por la OMC y la OCDE (Organización para la Cooperación Económica y el Desarrollo) indican que, durante el período octubre 2011 y mayo 2012, se establecieron unas 124 medidas restrictivas al comercio; principalmente, subas de aranceles, licencias de importación y controles en aduanas. En el análisis realizado por países, se evidencia que los que más restricciones implementaron, durante este período, fueron Brasil, con 30 medidas, India con 28, Unión Europea con 27, Estados Unidos con 22; Argentina, China, Sudáfrica y la Federación Rusa 13 cada uno; Canadá, Indonesia y Turquía, 12; Australia y Corea del Sur 7; y México 9.

Un poco más adelante en el tiempo, en su informe sobre las medidas comerciales del G-20, publicado en junio de 2013, el director de la OMC Pascal Lamy dijo que en los siete últimos meses las economías del G-20 han aplicado más de 100 medidas restrictivas del comercio, lo que abarca el 0,5% de las importaciones de mercancías de esas economías. Los países del G20 representan el 85 por ciento de la economía mundial, 80 por ciento del comercio internacional y dos tercios de la población del mundo. Este año el mismo informe, publicado en junio, dice que los miembros del G-20 establecieron 112 nuevas medidas restrictivas del comercio en el período de mediados de noviembre de 2013 a mediados de mayo de 2014.

Estamos entonces hablando de prácticas que realizan la gran mayoría de los países del mundo y en ese sentido Argentina no es la excepción. La necesidad de disponer de una balanza comercial favorable como base de política económica en virtud de las necesidades divisas que requiere el país contribuyó a la implementación de medidas que son habituales en el mundo. Haz lo que digo pero no lo que hago es la condigna de los países centrales que tienen en la OMC un ámbito donde esta misma se reproduce y aplica.

Fuente: Ambito