26/06/2015 |
El Ministerio de Economía definió flexibilizar la provisión de dólares para importar partes, piezas e insumos para la industria nacional.
El Gobierno desde el 1º de julio va a incrementar las divisas destinadas a la importación de insumos, partes y piezas que requiera la industria nacional para operar. Un ejemplo es el sector de la electrónica de consumo radicado en Tierra del Fuego, que pasará de 233 a 300 millones de dólares por mes para adquirir componentes asiáticos, lo que representa una suba del 28,7 por ciento. El objetivo oficial es que el incremento en el poder adquisitivo de los trabajadores a raíz de los aumentos en paritarias y en las asignaciones familiares se traduzca en consumo al encontrar mayor oferta en los comercios. A la vez, que la manufactura local mejore su nivel de actividad al tener más margen para expandir la producción, que tiene por lo general un nivel alto de contenido importado.
Dos elementos explicativos aparecen en el escenario de la medida. Por el lado de la necesidad, la cercanía de las elecciones nacionales y el programa del Gobierno de dar el mayor impulso posible al mercado interno, como termómetro del humor social no sólo por el lado del consumo sino también de las posibilidades laborales en la industria y los servicios. Del costado de las posibilidades, el equipo liderado por el ministro de Economía, Axel Kicillof, configuró una ingeniería financiera que, a través del swap de monedas con China y de las emisiones puntuales de deuda, logró esquivar el bloqueo de los fondos buitre y del juez Thomas Griesa. De ese modo, las reservas internacionales se recompusieron, lo que permitió desplegar la medida ayer adoptada por Kicillof junto al presidente del Banco Central, Alejandro Vanoli, que llega en un contexto en el cual los funcionarios buscan transmitir certidumbre para evitar tensiones en el mercado de cambios, ante la suba de la cotización del dólar ilegal.
“Se tomó en cuenta la estabilidad en el mercado cambiario y el fortalecimiento del nivel de reservas para ampliar el monto para los importadores”, explicaron fuentes oficiales, que aclararon que “el Gobierno comenzó a ampliar el acceso al mercado de cambios para importaciones desde comienzos de este año y, en abril pasado, sectores como automotriz, electrónico, químico, comercio y otros ya habían obtenido casi 5000 millones de dólares para cumplir con sus compromisos”.
El Gobierno decidió a partir del 1º de julio aumentar la disponibilidad de divisas para importación para el conjunto de la economía. Esto no necesariamente implica una suba del mismo calibre en la autorización de las Declaraciones Juradas de Importación (DJAI). Es que las importaciones pasan por dos filtros. En primer lugar, la Secretaría de Comercio, en función de los planes anuales de producción, empleo y precios que coordina con las empresas, pone a disposición determinada cantidad de DJAI que aprueba de manera paulatina. Una vez que el importador obtiene ese visto bueno, pasa al siguiente filtro, ya que el Banco Central puede no liberar las divisas necesarias para la operación. Si no lo hace, el empresario acumula una deuda con el proveedor o directamente no efectúa la compra.
La idea es entonces que ahora ese segundo filtro se relaje y que las DJAI aprobadas y acumuladas se vayan agotando, lo que se reflejaría en más bienes de consumo importados en las góndolas y vidrieras, insumos, partes y piezas para la industria y bienes de capital para las inversiones. El Ministerio de Economía pretende que las divisas se utilicen para importar, aunque los empresarios consultados esperan también poder pagar con esos dólares la deuda que se acumuló con los proveedores en el exterior.
“Las 50 empresas más grandes tienen deudas acumuladas. Entregaremos esa información al Banco Central en estos días para que se puedan reducir esos pasivos, que perjudican la relación con los proveedores”, indicó a este diario Diego Pérez Santisteban, titular de la Cámara de Importadores.
Uno de los sectores favorecidos es la electrónica de consumo radicada en Tierra del Fuego. Ayer la ministra de Industria, Débora Giorgi, recibió a los directivos de las empresas y les comunicó que durante el segundo semestre podrán acceder al Mercado Unico y Libre de Cambios (MULC) por un monto mensual de 300 millones de dólares mensuales, en lugar de los 233 millones que regían hasta ahora, para importar piezas, partes y máquinas completas que se utilizan en la producción de celulares, televisores y aires acondicionados, entre otros artículos. El Ministerio de Industria informó que las empresas del sector se comprometieron a sostener los niveles de empleo y de producción. En tanto, desde las electrónicas indicaron a este diario que los 300 millones mensuales que dispondrán les va a permitir recuperar al nivel de actividad de 2013 y que esa mejora incrementará la oferta de productos al público. Fuentes oficiales manifiestan que en el sector automotor, otro gran importador, no se va a replicar el aumento otorgado para las electrónicas.
Fuente:
Página12